La cámara a restaurar, fue una Zeiss Ikon Nettar y presentaba dos problemas básicos:
- Filtraciones de luz a través del fuelle.
- Opacidad de una de las lentes del objetivo.
El material del que está formado el fuelle, pierde elasticidad con el paso de los años y se debilita, sobretodo en los pliegues, comisuras y esquinas. Esto provoca que terminen apareciendo pequeños orificios, por dónde se filtra la luz exterior en el interior de la cámara e incide en la película, provocando veladuras. Para solucionar el problema, se optó por la reparación del fuelle original, con el objetivo de que la cámara pudiera ser utilizada, sin que perdiese originalidad.