A continuación, voy a tratar de hacer un breve repaso a la historia de los exposímetros (fotómetros), ordenados cronológicamente, partiendo de los más antiguos hasta los más actuales, clasificados como de extinción, célula de selenio, célula de sulfuro de cadmio (CDs) y por último, de fotodiodo de silicio.
Exposímetros de extinción.
Aparecidos en finales del S-XIX, se consideran los primeros exposímetros diseñados para la medición fotométrica de la escena. Su funcionamiento es puramente óptico. No utilizan ningún tipo de batería, ni utilizan ninguna fuente de energía elécgtrica para funcionar. De hecho, ni disponen de ningún circuito eléctrico. Simplemente, cuentan con un sistema óptico, basado en diferentes diafragmas y/o filtros, tal que los rayos de luz que penetran en el dispositivo, a través de él, iluminan una serie de números, que pueden verse a través de un visor. Según la cantidad de luz que entre, puede verse una serie numérica u otra. Existen diversos tipos y métodos de lectura de éstos, pero lo más habitual es que la medición la marque la cifra más alta que se es capaz de visualizar.